“SOLO LE PIDO A DIOS…”*

*Leon Gieco, adaptación libre El Gobierno Nacional que, desde el show diario de CFK por cadena nacional se ufana de los grandes logros obtenidos en sus casi 10 años de gestión, acusa a los economistas (obtusos y pajarracos) y a los periodistas (impulsados por Magnetto) de presagiar el “Apocalipsis” y este no se produce, de ser desestabilizantes y con gran animosidad al Gobierno, que finalmente no están equivocados en sus apreciaciones. Tal es así que ocho ex Secretarios de Energía, de diferentes signos políticos advirtieron sobre el seguro desabastecimiento energético y que fueran muy maltratados por el ex Ministro y actual Vicepresidente Boudou, terminaron teniendo razón, por siempre y sencilla: con la caída de producción y reservas y la falta de inversión en el sector no podían terminar de otra manera. Igualmente, en economía hay muchas acciones que no producen efectos inmediatos pero, sin lugar a dudas, se ponen fuertemente de manifiesto cuando los presupuestos se dan, por ejemplo: un gasto publico desmedido, alta y constante inflación, llevan necesariamente al agotamiento de las fuentes de financiamiento (stocks) que deben ser sustituidos por otros mecanismos emisión monetaria también descontrolada que contribuye a la inflación; retraso cambiario que termina siendo un elemento que, combinado con la inflación quita competitividad a la producción local y por ende las exportaciones caen y los ingresos no alcanzan a cubrir egresos (importaciones)con mas una fuga de capitales constante y abundante, lleva a la toma de medidas como las que a diario profundizan la crisis del sector externo de la economía, con la imposición de controles y restricciones que asfixian a la producción y coartan la libertad individual y los derechos de propiedad. Esto pega en el nivel de actividad, se desacelera el crecimiento, la inflación no cede, porque los mecanismos para impulsarla no cambian y el estado emite y gasta a troche y moche para mantener un “estado de bienestar ficticio” que más tarde o más temprano se cobra la factura, ya que el apriete para contener los precios fracasa. La argentina no tiene acceso a los capitales internacionales que pululan por el mundo en abundancia y a costos muy bajos, porque no ha honrado sus compromisos, Club de Paris y otros pero ademas, al colocar al FMI como el enemigo, no hay un reporte serio de lo que ocurre en la economía nacional, cuyas estadísticas están bajo sospecha desde ya hace mas de 6 años en lo interno y lo externo. Argentina no goza de confianza, ni garantiza los tan arcaicos conceptos (sic Kicillof), de seguridad jurídica y previsibilidad con reglas de juego estables y duraderas , pese a los discursos presidenciales y sus consejos al mundo sobre cómo se manejan las crisis. Una nueva forma de confiscación se acerca, Menem la llamo “Plan Bonex”, antes Alfonsín, “Ahorro Forzoso”, mas tarde De la Rúa/Cavallo “corralito/corralón” y, ahora el Gobierno, de la mano de Kicillof analiza un nuevo plan que, por ser del bicentenario y siguiendo con el nacionalismo demagógico se denominaría “Bono Patriótico”, es el mismo excremento pero con distinto olor . ¿Que pensamos que pasara?, pues bien, primero hay que decir que nuestro sistema financiero es pequeño e irrelevante, la monetización de la economía muy pobre, el promedio de depósitos no supera los 45 días y más aun con la tremenda fuga de capitales que los K supieron generar, nada extraño seria pues que CFK dictara un DNU, ya que por obvias razones no se bancaria 15 días de discusión en el Congreso, gravando la renta financiera, que al decir de Proyecto Sur está dentro de las denominadas “extraordinarias”. Gravar la renta financiera implica: transformar en imponibles los intereses de los plazos fijos, la compra venta de títulos públicos, la compra venta de acciones en la bolsa, como los volúmenes transaccionales en estos sectores no son de alta significación, los ingresos que esto produciría seria una simple aspirina para una enfermedad, qué no viene tratándose desde hace ya varios años. Le seguiría a esta medida o seria concurrente el canje de gran parte de los depósitos, lo que se está discutiendo es la línea de corte, por un “Bono Patriótico”, tal como lo menciono párrafos arriba, y como bien sabemos que los argentinos hemos sido irresponsables al evaluar la conducta del gobierno en el bastardeo a las instituciones de la Republica, confundiendo democracia con lo que digo y hago pues creen que el 54% hará que los argentinos alegremente se van a dejar manotear sus ahorros y seguirán cantando ¡Fuerza Cristina!. Muchas discusiones en el Gabinete hay por este proyecto, los más realistas se oponen, caso Moreno, que será loco pero no “boludo” y el idealismo estalinista de Kicillof. En los próximos días veremos si triunfa la postura del “Príncipe” o del “Joven Maravilla”. La visera más sensible será penetrada y con ello la conducta de la ciudadanía tendrá otro cantar. De allí en más en que acabara el Gobierno Nacional y Popular, no lo sé, pero frente a estas experiencias, mirando el pasado, o se llevaron a los gobiernos puestos, o la conflictividad social llevo a adoptar medidas muy drásticas que, a la postre también se terminaron por llevar puestos a los gobiernos. Aquí no quiero hacer futurología, cada quien sacara sus propias conclusiones y espero que ellas sean más seria que las que tuvieron cuando emitieron su voto el pasado mes de octubre. “Solo le pido a Dios, que la argentina no le sea indiferente, que por unos pocos que nos roban y nos mienten, que merezcan el repudio de las gentes”