Enrique García-Mansilla Consultores

ARGENTINA
UN PAIS DE BUENA GENTE

(Slogan publicitario del Gobierno Nacional)

Con el slogan publicitario que encabeza esta nota, el Gobierno Nacional apela a la “generosidad” de aquellos que pudiendo deberían renunciar a los subsidios y contribuir así no a que los mismos se dirijan, a los más necesitados de la sociedad, sino a resolverle el problema del déficit al gobierno, que los llevo de 6.500 millones de pesos a cerca de 60.000 millones entre el mandato de Néstor Kirchner y el primero de Cristina.

No quedan dudas de este hecho cuando nos enteramos quienes eran los beneficiarios de los mismos: Bingos y Casinos entre otros, que están en manos de los amigos del poder.

La excepcionalidad de los subsidios termino hace ya varios años, esto es en el 2005/2006, al menos de los subsidios indiscriminados, pero el gobierno no adopto las medidas necesarias para su resolución gradual y no traumática, porque no era políticamente correcto hacerlo y prefirió confiscar los fondos administrados por las AFJP y acelerar la emisión monetaria, que comenzaron a mostrar signos de inflación y con ella apareció la mentira estadística, destruyendo el INDEC.

Suele decir Ricardo Arriazu que, en economía cuando se postergan medidas necesarias en defensa de la política, los problemas se agravan y al tomar las decisiones, se producen efectos no deseados de mayor profundidad. Ante esa situación nos enfrentamos hoy.

El superávit fiscal, uno de los pilares de este “modelo” lentamente comenzó a perderse y con su perdida la necesidad de buscar fuentes alternativas de financiamiento porque salir a los mercados internacionales le está vedado a nuestro país, que sigue aun en default ante el Club de Paris y grupos de bonistas privados que no accedieron a los canjes, algunos con sentencias favorables en los tribunales neoyorquinos.

La fuerte fuga de Capitales que ha acompañado a toda la gestión de Doña Cristina, financiada por el saldo favorable de la balanza comercial, fundamentalmente por las exportaciones de soja, automotriz y metal mecánica a Brasil, ya va quedando chica, la soja bajo y Brasil devalúa, esto es encarece la producción industrial que el país exporta. Cristina, en su incontinencia verbal en su reciente entrevista con Dilma Ruseff, Presidente del Brasil, cuestiono fuertemente el déficit de la balanza comercial entre ambos países. Se olvida CFK que ese auditorio no es la clientelar concurrencia a sus ya monótonos y engañosos discursos que pronuncia a diario en nuestro país.

Los Movimientos Nacionales y Populares (perdonen el uso de este término), versión de post-guerra para identificar a los movimientos fascistas de Italia o Nacionalsocialista de Alemania) tienen la tendencia a creer que cerrando la economía, restringiendo las importaciones y castigando a los exportadores con “retenciones”, protegen por un lado a la industria y la producción y por el otro a los consumidores internos.

Con estas políticas, se logran muchas cosas: (a) nadie hace esfuerzos por los costos y la producción se hace cada vez mas ineficiente, (b) no me compras, no te compro y si exporto subfacturo. No será el teorema de Pitágoras, pero es tan certero como el mismo.

Ni el 54% de la voluntad popular que se le otorgo a la PresidentE/A ha podido frenar la fuga de Capitales que la ha acompañado en todo su mandato, y la intervención de la SS en la que se ha convertido la Secretaria de Comercio, hoy interviniendo en cuanto mercado hay, sea o no de su competencia, ha podido frenarla, solo la ha podido amortiguar y bajarla de USD 3.800 millones a USD 2,500 millones mensuales en el mes de noviembre y que no se duerma Moreno porque se llevaran todo dólar que ande dando vueltas, pero ahora financiados con las reservas “de todos los argentinos”.

Muy ansiosos están los Periodistas, Empresarios y Dirigentes en General, esperando los anuncios de la Presidente en su próximo monologo ante la Asamblea Legislativa donde jurara, el próximo 10 de diciembre como Presidente de la Nación en su segundo mandato. Estos deberían revisar lo que ella misma dijo el 10 de diciembre del 2007 y ver que ocurrió. Prometió institucionalización, y la logro: institucionalizo e incremento la corrupción y la Fundación Madres de Plaza de Mayo y su Plan Sueños Compartidos es un ejemplo, entre muchos otros, del cumplimiento de su palabra.

Pues lamento decepcionarlos, pero no escucharemos la designación de ninguna persona con personalidad, nivel o equipos para manejar la economía del país, en un año que se presenta difícil en lo interno y complejo en lo externo. Con el 54% Cristina cree que todo se puede, por ello esta apelación a la demagogia con personalidades artísticas, “buena gente”, que nos invitan a renunciar a los subsidios.

Lo que está por ocurrir, y que empezaremos a sentir a partir de febrero próximo es un misil a la clase media argentina, ya que es ese segmento de la población que consume servicios de luz, gas, agua potable, expensas comunes, seguros, medicina prepaga, educación privada y, todos estos servicios se potenciaran, y se reducirá substancialmente su poder de compra y con ello habrá recesión y una mayor inflación y como ya anticipo Moyano, las paritarias se harán sin piso y sin techo, por más que la PresidentE/A quiera limitarla al 18%, con el aplauso y connivencia del empresariado nacional.

Los placebos, léase subsidios, sirven un rato, no permanentemente y más cuando el Gobierno gasta locamente los recursos públicos en financiaciones millonarias: Aerolíneas Argentinas, Propaganda política, o futbol para todos, etc.

El Gobierno no ha sabido administrar el crecimiento, el empleo creció hasta colmar la capacidad instalada ociosa y luego se freno, en los asentamientos o villas, sus habitantes están “colgados a la luz, utilizan garrafas de gas, no tienen agua corriente, por lo tanto nada les ha de cambiar, los ricos gastaran un poco más, pero seguirán siéndolo, es la clase media, ilusoriamente aportantes de cerca del 25% de los votos que la que pagara la realidad, pues dentro del contexto internacional en que vivimos ya no habrá “viento de cola” y por ende el crecimiento será muy bajo y, por lo tanto, no generara crecimiento en el empleo y mucho menos en la recaudación, salvo el adicional por inflación.

Con solo pedirle al Archivo General de la Nación una versión reducida de lo ocurrido previo a “El Rodrigazo” que el Dr. Garcia Martínez definió como “Cegetazo”, la Sra. Cristina podría leer el futuro que, como ya hemos dicho, será nefasto más temprano o más tarde.

Ustedes dirán que quien escribe estas líneas es un pesimista y agorero, pues no es así, mi optimismo de hoy se condice con el que tuve entonces cuando, Ricardo Arriazu me hizo entender que, cuanto antes toquemos fondo, antes volverá la racionalidad y las cosas se harán con mayor seriedad, cordura y racionalidad y la improvisación quedara de lado.

Lo más doloroso de este proceso, no lo duden, es que quedara muy dañada mucha “buena gente” de este nuestro país, La Argentina.