viernes, 9 de octubre de 2015
PENSAR QUE SE VOTA
Estas lecciones no son una elección más, tanto en la
Provincia de Buenos Aires como a nivel
Nacional. No está en juego un Gobernador o un Presidente, estamos eligiendo una
forma de país, una manera de convivir, una manera de interrelacionarnos con el
mundo.
En estos casi 12 años se ha ido construyendo un país
pequeño, con instituciones manoseadas, sea este el Congreso, sea esta la
Justicia, la práctica de la corrupción ha sido una metodología constante,
llevarse por delante la justicia una necesidad imperiosa para realizar los
fines inconfesables de un gobierno que se hizo dueño del estado y, a partir de
allí construyo un relato, instalo una metodología de exclusión del pensamiento
opositor, con los recursos del Estado,
doblego gobernadores, la finalidad ir por todo.
La pobreza, la marginalidad, el crimen permanente, el
narcotráfico y la de normas elementales de buena praxis economía, nos han
traído a este momento, que con soberbia y tozudez este zoológico que nos
gobierna está dispuesto a profundizar hasta el último minuto de su mandato un
modelo dañino de la gestión del Estado.
Nuestro voto es la herramienta para cambiar este estado de
cosas, salir del aislamiento, encarar políticas educacionales que
verdaderamente sean el punto de partida de la igualdad de oportunidades que
supimos tener, que la economía esté al servicio del progreso y la justicia al
servicio de la verdad. Que el respeto por las minorías sea una constante y no
una utilización temporaria, con temas sensibles a la sociedad.
Lo que describo, amigos es, estamos eligiendo Populismo
degradante o Republica con mirada de futuro.
Yo creo que estos principios éticos republicanos, con
errores, por cierto, hoy los expresa
Cambiemos, integrado por una fuerza nueva, un Radicalismo que siempre se
enfrento al clientelismo y brego por la Republica y la Coalición Cívica que
lucho por la transparencia.
Le hemos dado poder a tantos crápulas, es el momento de
dárselo a quienes nos garanticen dignidad ciudadana e institucionalidad
Republicana.
La sociedad demanda un cambio, necesita un cambio, romper
esta grieta nefasta que nos enfrenta entre amigos, familiares, compañeros de
tareas y ha generado un clima beligerante solo conocido entre países antagónicos.
En su afán destructor ignoro primero y bastardeo después el
Mercosur, ámbito natural de un mercado ampliado que nos brinda la masa crítica
para el crecimiento de la economía, destruyo el campo: la ganadería, la lechería,
las economías regionales e hizo ineficientes sectores altamente competitivos en
el concierto de comercio mundial.
Bajo la pomposa frese de soberanía monetaria, bastardeo la
moneda y nos encorsetó en un cepo que lo único que logro fue sacarnos
libertades, bajo la pomposa soberanía energética nos dejo sin petróleo, gas energía,
creando limitaciones insalvables para el crecimiento, estancando la economía,
generando empleo estatal improductivo, clientelar e ineficaz.
Bastardeo la historia y degrado la educación, principio
rector de la verdadera igualdad de oportunidades y haciendo oídos sordos a
opositores, intelectuales serios destruyo sin miramientos la escuela pública,
la escuela de todos.
Doce años de crecimiento único en la historia, no produjo la
renovación vial, ferroviaria y portuaria tan necesaria para hacer competitivas
a las economías regionales.
Ha vuelto a ser Argentina la tierra de las oportunidades
perdidas, por una ideologisación inaceptable que el gobierno ha denominado “Proyecto
Nacional y Popular” que solo ha beneficiado a unos pocos amigos del poder pero
no a la nación.
La justicia ha sido colonizada, pocos jueces probos quedan
en la Nación y sin Justicia no hay libertad, sin justicia no hay equidad
social, sin justicia no hay inversiones y sin inversiones no hay crecimiento,
la gente solo se la convoca para aplaudir o para votar con prácticas
clientelares obscenas.
En pocas semanas podemos revertir esto, no será ni fácil ni rápido,
pero cuanto más demoremos este proceso de transformación, condenaremos a nuevas
generaciones a vidas Cambiemos y así nos daremos una oportunidad que
trasladaremos a nuestro hijos.
La droga, el narcotráfico y sus secuelas hoy rondan por toda
la sociedad y toman de rehenes a los más pobres y su mano de obra son jóvenes
que inducidos primero al consumo, luego son la carne de cañón de los narcos,
que los compran, los prostituyen y no solo le roban el futuro a esos jóvenes,
se los roban al país.
Un verdadero cambio es imperioso y ese cambio solo lo pode
hacer vos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario