Se viene la crisis, se viene

“Quien se enfada por las criticas, reconoce que las tenia merecidas”
Tácito

Escribe Enrique García-Mansilla


El Gobierno Nacional anuncio una serie de medidas para enfrentar la crisis internacional que hasta hace unos meses no nos afectaría según la misma fuente pero que hoy se asume que no ha de pasar desapercibida en la economía argentina. Es imperativo aclarar que los problemas que hoy se enfrentan tienen más sustento en los propios desatinos que en los rebotes de lo que ocurre en el mundo.

Las medidas anunciadas tienen dos vertientes: una fiscal, que podemos resumir en la condonación de deudas a los que regularicen empleados informales en las empresas, reducción en el pago de cargas sociales para quienes efectúen nuevas contrataciones y, la facilidad para el reingreso de capitales que en otras oportunidades salieron del país, con diferentes alícuotas de pago según el destino que se de a estos fondos que van desde el 8% al 1%, otra es un fuerte plan de obras públicas por la suma de $ 75.000 millones de pesos, con el objeto de generar mayores niveles de empleo, calculando el Gobierno que este programa generara unos 350.000 nuevos puestos de trabajo.

Por lo tanto el Gobierno ha reconocido que no estamos inmunes a la crisis por un lado e intenta generar instrumentos de política económica para preservar el empleo y el crecimiento de la economía.

Simultáneamente aglutina en un nuevo Ministerio, el de Producción, a los sectores generadores de recursos, ya sea para exportación como para el mercado interno, estos son Industria, Agricultura y Ganadería y Turismo, como ejes centrales de este nuevo organismo estatal.

Débora Giorgi, la elegida para encabezar este nuevo Ministerio tiene vastos antecedentes en lo que a la economía real se refiere ya que en sus inicios en el estudio fundado por Javier Gonzalez Fraga se dedicaba casualmente a temas vinculados con la economía real, desempeñándose luego como Secretaria de Industria en el Gobierno de la Alianza y actualmente ejerciendo el cargo de Ministra de la Producción en el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires.

Todas estas medidas deberán pasar por el congreso y es de esperar que allí, el oficialismo permita a la oposición dar su aporte que permita perfeccionar estos instrumentos para posibilitar su enriquecimiento y aclarar con mayor énfasis el objeto deseado que es el fortalecimiento del empleo y la generación de medidas que permitan que se cuente con instrumentos validos que acerquen financiamiento tanto a la producción como a la demanda.

No obstante ello y pese a mi poco conocimiento económico, hay algunos interrogantes que me surgen al analizar las medidas adoptadas y que tratare de compartir con ustedes en este articulo.

El nivel de actividad no solo se mide por la oferta de productos sino por la demanda de los mismos, estos es que la sociedad consume, no solo bienes esenciales sino también bienes durables y semidurables, para ello o se resigna ahorros o se generan políticas crediticias que puedan ser pagados, o sea a tasas de interés y plazos acordes con los bienes a ser adquiridos, en estos momentos el crédito es casi inexistente y existe un gran temor en la población para endeudarse sobre la continuidad del empleo.

Por otra parte, el financiamiento empresario también es altamente oneroso ya que las tasas pasivas de interés están a niveles altos para evitar o contener la fuga de depósitos en el sistema financiero y las tasas no bajan por voluntarismo sino por un elemento muy importante que se trata de la confianza y las expectativas positivas sobre el comportamiento de la economía.

Para la generación de confianza el Gobierno debe tomar medidas que coincidan con las realidades que vive la población, esto es un verdadero sinceramiento estadístico que hoy no tenemos y que pone un punto de desconfianza no menor entre los actores económicos.

La caída del consumo que se está operando es la que está produciendo la desaceleración de la producción, obligando a empresas a suspender horas extras, anticipar vacaciones y, en algunos casos, producir despidos a los que proyectos tales como el aumento de las indemnizaciones no contribuyen al sostenimiento del empleo o a la contratación de nuevos empleados.

No sólo el Gobierno debe asumir que la situación actual es delicada y que las perspectivas no son las más alentadoras, sino que debe abrir el dialogo con generosidad, tal como pretende hacerlo con la Iglesia en los próximos días, y también con los Gobernadores, Jefe de Gobierno y partidos de la oposición que seguramente tendrán sus diagnósticos sobre la crisis actual en sus distritos.

También esperamos que este nuevo Ministerio de la Producción pueda actuar con toda libertad, sin condicionamientos, con los diversos sectores que deben actuar en el incremento de la producción y en la puesta a disposición de bienes y servicios para generar los recursos que permitan, pagar las obligaciones y atender los requerimientos del mercado interno.

¿Tendremos un campo eficiente con este nivel de retenciones con la realidad de los nuevos precios internacionales?, ¿podremos ser eficientes exportando con regulaciones establecidas que generan trastornos en el cumplimiento de la gestión exportadora e incrementan los costos transaccionales?, ¿podrá la Ministro Giorgi, romper este círculo vicioso generado después de la protesta con el campo y tendrá el apoyo político para lograrlo?

El tipo de cambio, ¿responde a la realidad monetaria y económica?, ¿tiene o tendrá el gobierno los recursos fiscales para poder dar solución a estos temas?, como verán los interrogantes son muchos y profundos ya que no podemos contar con el stock confiscado a las AFJP sino con su flujo, ya qué argentina no tiene acceso al financiamiento externo, primero porque no existe, salvo el que pueda proveer los organismos multilaterales de crédito que, por razones políticas no se quiere acceder y que razonablemente podrían contribuir a aliviar la carga fiscal para generar así mayores recursos a la población para el consumo.

EEUU, si bien ha volcado ingentes cantidades de dinero para sostener el sistema financiero y generar confianza en las instituciones, también ha salido a poner ingentes cantidades de dinero para reactivar la demanda, según los recientes anuncios del Secretario del Tesoro.

Hay que estabilizar la oferta y generar producción, sea para el mercado interno como para la exportación, pero no debe descuidarse la demanda, que es la que verdaderamente genera que los niveles de actividad se sostengan.

Recesión es igual a caída de la demanda, inflación es demanda creciente y oferta estancada, entre otras cosas; luego está el manejo cambiario, el gasto público y el descontrol monetario, y nosotros hemos tenido un poco de todo esto estos últimos años.

En algún casos hemos provocado estos problemas como el caso del campo, anuncios que nunca llegaron a concretarse, opiniones que nos alejaron de la racionalidad, ¿habrán los K aprendido la lección?, por el bien del país y sus ciudadanos esperamos que esta actitud de la PresidentA/E no sea tan solo nubes de humo que confundan a la sociedad, sino que genuinamente se ponga el gobierno a la cabeza de los problemas y logre acuerdos que originen soluciones o paliativos a la crisis que, sin duda alguna nos llegara.

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